Portada

Desempleo por Covid-19, la IP responde ¿cómo se pueden salvar miles de empleos?

Ésta es la pregunta a la que buscan dar respuesta los empresarios que operan en México. Ellos caminan solos, dado que el gobierno federal establece medidas a cuentagotas y esto no se asemeja a un paliativo.

Más de 800 mil empleos directos que, a su vez, generan cada uno nueve indirectos, es lo que está en riesgo debido al Covid-19. Y ni hablar del desempleo que ya se arrastraba antes de 2019, y al que no se le podrá dar cabida.

México será uno de los tres países de América Latina más afectados por esta pandemia que trastoca al ser humano en todos sentidos.

“Los trabajadores y las empresas se enfrentan a una catástrofe tanto en las economías desarrolladas como en las que están en desarrollo”, así lo declaró el director general de la OIT, Guy Ryder. Y México aún está en proceso de analizar posibles medidas.

Una caída que va, en el mejor de los casos, del 6.6%, como pronostica el Banco Mundial, y el 8% que prevé Bank of America, es lo que se busca sopesar, para que el daño sea el menor posible.

Y precisamente siendo mayo el mes del trabajo. En esta edición de Evidencias buscamos a los cinco líderes de las cúpulas empresariales más representativas de México, para así conocer qué se está haciendo, qué se puede hacer y cómo se puede evitar una caída que no tenga fondo.

Aquí la voz de: Carlos Salazar, presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE); Francisco Cervantes, presidente de la Confederación Nacional de Cámaras Industriales (Concamin); Enoch Castellanos, presidente de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra); Bosco de la Vega, presidente del Consejo Nacional Agropecuario (CNA), y Gustavo de Hoyos, presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex).

Estas instituciones, que concentran a más del 90% de las empresas en México, están trabajando para mantener el óptimo funcionamiento del sector empresarial en todos sus rubros, para garantizar que toda la cadena de suministro esté protegida y pueda funcionar de manera fluida, lo que, a su vez, garantizará, en algunos casos, que al momento de su reactivación se mantengan la mayoría de los empleos y empresas posibles, y en el caso de los empleos aún en operación, como es el de alimentos, pueda generar el abasto de alimentos para la población.

En este momento, la principal prioridad de las cámaras y confederaciones es trabajar para evitar cualquier tipo de problema de seguridad que pueda surgir a causa de las medidas de contención implementadas por México y los demás países.

También despliegan estrategias de defensa legal para los casos que aplique diferir los impuestos al amparo del Código Fiscal de la Federación y la Ley Federal del Trabajo, previstos ante la pandemia.

Hay en la legislación, tanto en la Ley del Seguro Social, la Ley Federal del Trabajo, el CFF e Infonavit, situaciones extraordinarias que muchos empresarios desconocen y que la autoridad no ha ofrecido.

Asimismo, y como parte del CCE, estas cúpulas empresariales realizan propuestas y acciones con el fin de mitigar los impactos negativos que esta crisis sanitaria está generando en la economía, cuyo objetivo primordial es preservar los empleos, los salarios y los ingresos de las familias y sentar las bases para una recuperación económica inmediata.

En términos generales, se vislumbra una desaceleración de la economía, lo que consecuentemente impactará en el dinamismo de las empresas.

En consecuencia, tanto la demanda interna como las exportaciones pueden perder dinamismo, por lo que el ritmo de la producción, procesamiento, comercialización, podría tener que ajustarse y por ende resultará necesario para las empresas hacer reajustes en el corto y mediano plazos, en su planeación, sus metas y finanzas.

Pero sin lugar a dudas se requiere la creación de un gran acuerdo nacional entre el gobierno federal y la iniciativa privada con la finalidad de enfrentar la crisis económica que implica el aislamiento social derivado del combate al coronavirus en México. De lo contrario el desastre que se avecina será imparable.

Avances a cuentagotas

Pedían un subsidio a las contribuciones del Seguro Social y del Infonavit, no se consiguió, pero sí se está consiguiendo el diferimiento de las cuotas patronales del seguro social.

Esto no es una concesión del gobierno, tanto el IMSS como el Infonavit son tripartitas y tienen en sus consejos técnicos a la máxima autoridad de estos institutos y ellos con representante y consejeros de los patrones, de los trabajadores y el gobierno federal, toman la decisión de autorizar este diferimiento al amparo de lo que dice la propia Ley del Seguro Social, entonces a propuesta de los consejeros patronales se somete esto y les da alivio a los patrones.

En cuanto al tema de la disposición de las devoluciones de IVA, todavía no se están liberando.

Los préstamos de 23 a 25 mil pesos a un millón de empresas, no les resuelve el problema, tienen que estar dadas de alta en el seguro social para que puedas acceder al crédito, la cantidad que te dan no te alcanza para pagar. Si tienes 10 o 15 empleados, la cantidad que te van a dar ni siquiera alcanza para pagar las cuotas del seguro social y del Infonavit.

Propuestas inmediatas

El pago a crédito de la electricidad. La electricidad puede significar para las mipymes entre un 15 y 60% de sus costos totales, nosotros pedíamos tres meses de crédito. Ésa sería una acción inmediata y que el gobierno puede generar una partida presupuestal a CFE que cuando ya pase la epidemia y recupere esta cartera, pues se lo regrese.

Otra cosa que pudiera hacerse es reactivar las compras de gobierno a locales, a mexicanos, y pagarles de contado, así como el pago de todos los adeudos que tiene atrasados, eso le daría liquidez para aguantar este mes y medio.

Buscar un modelo para aumento de contenidos nacionales y de sustitución de exportaciones en los sectores automotor y energético.

Estimular la economía mediante una política fiscal activa; una orientación flexible de la política monetaria y la disponibilidad de financiamiento y recursos de apoyo a sectores específicos vitales, incluido el agroalimentario.

Apoyar a las empresas mediante medidas de soporte para el mantenimiento del empleo, ofreciendo a las empresas facilidades financieras/fiscales y otros medios de alivio.

Apoyar los ingresos de los trabajadores mediante la disposición de recursos públicos para ampliar la protección social a la población; es conveniente que la ayuda financiera y no financiera se suministre estratégicamente para animar a las empresas a preservar puestos de trabajo.

Para la reactivación económica es fundamental generar condiciones de certidumbre para promover las inversiones público y privadas que permitan continuar en la senda del crecimiento y el desarrollo.

De la misma manera, el combate a la pobreza y la generación de oportunidades se potencializarán generando mayor riqueza, promover la creación de más empresas, mayores empleos, fomentar la inversión en nuestro país, que tiene grandes oportunidades de desarrollo en muchos sectores de la economía, en el turismo, en el comercio, en la industria, en el desarrollo de tecnologías y, de manera muy importante, en el sector de la producción de alimentos.

52 mil 300 empresas

14 sectores industriales

3.5 millones de empleos

Representa el 9% del PIB

 

1.5 millones de empresas

7 millones de empleos

6 sectores industriales

Representa el 8.3% del PIB, 75% del PIB agroalimentario y 75% de las exportaciones agroalimentarias

 

Integra 47 cámaras nacionales, 14 cámaras regionales, tres cámaras genéricas y 59 asociaciones de los distintos sectores productivos del país

9.2 millones de empleos

Representa el 30% del PIB

 

 

36 000 empresas en todo el país

14 federaciones y 65 centros empresariales

4.8 millones de empleos

Representa el 30% del PIB

 

[pdf id=1264]

 

Descargar aquí

More in:Portada