Héctor Márquez Pitol*
En México hace falta recuperar 400 mil empleos formales de los perdidos por la pandemia. La llegada de la Covid-19 significó un factor agravante para los retos que venían acarreando el panorama del empleo en el país. Con impactos diferenciados, las mujeres y los jóvenes son ahora los más vulnerados.
En el caso particular de las mujeres, un contexto multifactorial recrudece la brecha de género en el mundo del trabajo.
Las trabajadoras están sobrerrepresentadas en los sectores más afectados por la pandemia, como son el comercio minorista, el ocio y la hospitalidad, e infrarrepresentadas en sectores en crecimiento como tecnología, operaciones y logística. A la par que asumen más responsabilidades de cuidado en el hogar.
Las mujeres dedican en promedio 25.33 horas a actividades no remuneradas, mientras los hombres sólo 8.40 en promedio, de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). Por estereotipos de género, las mujeres pasaron a desempeñar el papel de cuidadoras durante la pandemia.
Ante estas condiciones económicas y sociales el 53.55% de las mujeres en México no puede tener acceso a un trabajo formal, es decir, no cuenta con seguridad social, prestaciones y derechos laborales, lo que hace que sean precarias sus condiciones de vida sobre todo si son jefas de familia.
En la población joven, los millennials y centennials son los más afectados laboralmente por la pandemia.
De acuerdo con el estudio de ManpowerGroup “Escasez de oportunidades laborales para jóvenes”, en México aproximadamente siete de cada 10 jóvenes entre los 18 y 29 años reportaron dificultades para incorporarse al mercado laboral formal, debido a la falta de experiencia y habilidades.
Estos trabajadores tienen una actitud más analítica para aceptar un empleo, evalúan si se trata de un empleo formal, es decir, con contrato y prestaciones de ley o superiores, junto al crecimiento y flexibilidad laboral que les brinda, así como la cercanía del centro de trabajo a su domicilio.
Con todas las necesidades que va dejando la emergencia sanitaria, los trabajadores buscan: seguridad laboral, actualización de habilidades y equilibrio de vida laboral y bienestar.
La solución a las brechas en el empleo mexicano requiere a corto plazo incentivos a las pymes para que mantengan sus puestos. A mediano plazo acelerar las alianzas entre el sector privado y público con el objetivo de hacer un frente común en favor de la inclusión laboral. Y lo más importante a largo plazo, fomentar la creación del empleo formal.
Requerimos cerrar la brecha entre quienes pudieron seguir trabajando y estudiando de manera digital y quienes lamentablemente perdieron cerca de dos años, el objetivo en 2021 es recuperar los empleos perdidos por la pandemia y capacitar al talento para el mundo laboral pospandemia.
* Director de Relaciones Institucionales en ManpowerGroup
[pdf id=2337]