E l TMEC no será la panacea para que detone la economía mexicana. Se avecinan aplicaciones en materia laboral, ambiental, fiscal y para el sector automotor, así como se augura la salida de Jesús Seade como subsecretario para América del Norte
De acuerdo con Cristina Rosas, internacionalista e integrante del cuarto de al lado en el TMEC, con la aplicación de este acuerdo comercial saldrá a la luz que sí habrá supervisores del país vecino en territorio nacional para checar que México cumpla con el artículo 23
Es decir, siempre sí habrá inspectores de EU en México, vía las embajadas, para verificar que las empresas estén haciendo su trabajo en materia laboral.
Se tendrá que crear el Centro Federal y Registro Laboral para asegurar que los sindicatos se hayan conformado correctamente, bajo estatutos establecidos y libre albedrío. Acelerar la eliminación de las Juntas de Conciliación y Arbitraje. Pero esto no es lo más grave, hay más. El sector automotor tendrá que ajustar sus salarios a la par que los que se ofrecen en Estados Unidos, situación que debilitará aún más al gremio, el cual se encuentra en declive y representa un tercio del comercio que se tiene con Estados Unidos
El sector automotor en México deberá elevar sus salarios para emparejarlos con las armadoras de Estados Unidos
Armadoras europeas, japonesas y coreanas saben que estarán en desventaja frente a las estadounidenses Chrysler, Ford y General Motors.
Y aunque sabemos que este punto ya lo tratan los dirigentes de la AMIA, AMDA y ANTAD con el Gobierno Federal para que pueda ser gradual, la realidad es que esto podría darse hasta el segundo semestre del año en curso, de frente a la aplicación y entrada en vigor del TMEC.
Aunado a ello, el Congreso mexicano deberá acelerar reglamentos como el energético, agrícola, ambiental y laboral por el lado del outsourcing
En el tema laboral, si bien es cierto no se contempla desaparecer la figura del outsourcing, misma que en EU prevalece en su mayoría, sí se busca desaparecer las empresas fantasmas que utilizan este sistema para evitar el pago de impuestos.
Aún hay más. En el TMEC existe una cláusula, la cual determina que si México o Canadá hacen algún acuerdo comercial o fortalecen sus lazos comerciales con China, en lo particular o ambos países, Estados Unidos puede retirarse del TMEC y multar a sus socios.
Las letras chiquitas del TMEC podrían afectar las inversiones
Se requiere certeza jurídica y políticas públicas que detonen la economía mexicana
Otro tema álgido en las negociaciones, fueron las disputas comerciales, éstas sí siguen dirimiéndose entre jueces de los tres países, y no sólo de EU, como se planteaba en las negociaciones.
Ahora bien, nos aseguran que en materia de impuestos seguirá fuerte el tema en esta administración, bajo la presidencia de Andrés Manuel López Obrador, dado que ha sido una exigencia de EU y la OCDE para con México, ya que se considera que nuestro país tiene uno de los niveles más bajos en recaudación tributaria.
En fin, el TMEC viene a dar certeza, pero también se establecen criterios que endurecen la llegada de la inversión en México
De ahí que la certidumbre que dé el Gobierno Federal será prioritaria. Desafortunadamente, decisiones como el cierre de magnos proyectos, donde ya se tenía inversión y compromisos pactados a escala internacional, debilitaron la confianza en México.
Es fundamental, si se quiere ver un México en crecimiento, que haya políticas públicas sanas y mayor certeza jurídica, no se puede seguir apostando a una mejora del exterior, o a que la inversión siga cayendo a cuentagotas, las calificadoras y organismos internacionales continúan ajustando a la baja sus pronósticos sobre México en el corto y mediano plazos, y eso hace mucho daño.
